Alicante-Valencia IV: regreso y conclusiones

En el tren de media distancia que une Valencia con Alicante, de regreso esta madrugada. Se pagan 3 € por bici adicionales al billete si el trayecto es superior a los 100 km. Fascinante criterio... El tren, muy cómodo, eso sí. Acabarán desapareciendo y dejando el reinado y monopolio a todos los relacionados con la alta velocidad y la modernidad cateta. Y entonces veremos qué hacemos con las bicis. Ahora mismo ya sólo quedan dos al día entre Alicante y Valencia.
Algunas conclusiones en voz alta:
* Rey, reyes del aposteriorismo, si existiese como antónimo del apriorismo. ¿Cómo es posible que haya tardado tanto en retomar algo esencial en mi vida? Pregunta retórica que sólo nace a posteriori. Como tantas otras. Cuestión de dónde ponemos la atención. A veces se nos desvía.
* Para hacer lo que quiero hacer sigo sin estar en forma. Una cosa es una ruta de un día y otra es enlazar varios y llevar peso.
* El peso: no erré en mi equipaje. Erré en llevarlo todo a la espalda. El transportín me acompañará en otra ocasión.
* La edad, las lesiones y los límites: pues muy bien, mire vd, mejor de lo que pensaba. Hay un factor limitante en mi caso claro: la rodilla izquierda. Todo lo demás es trabajable y está casi en su sitio. La rodilla va a marcar el límite. Se verá.
* El viaje como elemento no cerrado. Me lo planteé así desde su génesis y fue un acierto. No sólo quería volver a salir en bici varios días; también quería ser capaz de irme sin tenerlo todo atado. Sólo sabía con certeza que el jueves a esta hora tenía que estar donde estoy ahora. Lo demás era un puro let it flow. Y fluyó de maravilla.
* El descanso como elemento esencial. La ducha, la cama, las horas de reposo. En mi caso no es comodidad. Puedo llegar a ser de una austeridad muy elevada, pero en trances de este pelaje, mi cuerpo necesita reposo y cuidados. De modo que eso es algo a tener en cuenta.
* Lo barato es barato. Y lo bueno, bueno y caro. Estrené varios adminículos -otro día lo abordo- y una cubierta y resultaron ser una maravilla. No los compré a precio de marfil pero baratos no fueron.
* Luego sigo...


* Sigo, unos días después, y acabo: la atención requiere concentración. La alta velocidad genera una inercia demasiado elevada. 

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